Ni siquiera sabemos lo fuerte que somos hasta que nos vemos obligados a sacar esa fuerza oculta. En tiempos de tragedia, de guerra, de necesidad, la gente hace cosas asombrosas. Es impresionante la capacidad humana para la supervivencia y la renovación.Isabel Allende
Desglosa las tareas en partes más pequeñas: Entiende la psicología detrás de la procrastinación. La procrastinación a menudo surge cuando nos sentimos abrumados por el tamaño o la complejidad de una tarea.
Al desglosarla en partes más pequeñas, puede resultar menos intimidante y más fácil de manejar.
Establece plazos realistas: Es importante establecer metas y plazos realistas para ti mismo y cumplirlos. Asegúrate de darte suficiente tiempo para completar la tarea sin apresurarte o sentirte abrumado. No te fijes plazos irrealistas para completar tareas.
Evita distracciones: Estas pueden dificultar el progreso. Reduce al mínimo posibles interrupciones desactivando notificaciones en dispositivos electrónicos. Trabaja en un ambiente tranquilo, libre de distracciones. Tu concentración es vital para avanzar en tus tareas.
Prioriza las tareas: Priorizar tus tareas puede ayudarte a concentrarte en lo más importante y evitar perder el tiempo en tareas menos importantes. Haz una lista de tareas en orden de importancia y trabaja en ellas en ese orden.
Impulsa tu motivación: Aunque sea fugaz, puede ser poderosamente efectiva a corto plazo. Úsala como chispa inicial para encender el trabajo hacia tus metas. Premiarte a cada hito logrado puede ser una gran táctica para fomentarla constantemente.
Practica la autodisciplina: La procrastinación a menudo es el resultado de una falta de autodisciplina. Intenta desarrollar hábitos y rutinas que te ayuden a mantenerte concentrado y en la tarea, como establecer un horario regular de trabajo o tomar descansos a horas fijas.
Controla tus emociones.
Controla tu mente.
Controla tu vida.
Via @LosMentalidad
Que te diviertas!
Al desglosarla en partes más pequeñas, puede resultar menos intimidante y más fácil de manejar.
Establece plazos realistas: Es importante establecer metas y plazos realistas para ti mismo y cumplirlos. Asegúrate de darte suficiente tiempo para completar la tarea sin apresurarte o sentirte abrumado. No te fijes plazos irrealistas para completar tareas.
Evita distracciones: Estas pueden dificultar el progreso. Reduce al mínimo posibles interrupciones desactivando notificaciones en dispositivos electrónicos. Trabaja en un ambiente tranquilo, libre de distracciones. Tu concentración es vital para avanzar en tus tareas.
Prioriza las tareas: Priorizar tus tareas puede ayudarte a concentrarte en lo más importante y evitar perder el tiempo en tareas menos importantes. Haz una lista de tareas en orden de importancia y trabaja en ellas en ese orden.
Impulsa tu motivación: Aunque sea fugaz, puede ser poderosamente efectiva a corto plazo. Úsala como chispa inicial para encender el trabajo hacia tus metas. Premiarte a cada hito logrado puede ser una gran táctica para fomentarla constantemente.
Practica la autodisciplina: La procrastinación a menudo es el resultado de una falta de autodisciplina. Intenta desarrollar hábitos y rutinas que te ayuden a mantenerte concentrado y en la tarea, como establecer un horario regular de trabajo o tomar descansos a horas fijas.
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