Ingredientes:
- Harina
- Pimienta Negra Molida
- Perejil Deshidratado
- Tomillo
- Romero
- Aceite
- Levadura fresca
- Azúcar
- Agua tibia
Para empezar pasá la Harina por un colador fino o tamiz (esto va a evitar que se formen grumos en la mezcla).
Mezclá la harina con la Pimienta, el Tomillo, el Perejil y el Romero. Volcalos en la mesada y formá un hueco en el centro, colocá en él el Aceite y el Azúcar y la Levadura diluidas previamente en Agua tibia.
Dejá que la Harina vaya cayendo hacia el centro del hueco y andá incorporando todos los ingredientes. El secreto principal para lograr una buena masa está en el calor de las manos y en tener paciencia. Amasá hasta formar una masa suave y lisa que no se pegue en tus manos, unos 15 minutos aproximadamente.
Colocá la masa en un bol, tapala con film o un repasador y dejá que leude una hora para duplicar su volúmen. Pasado ese tiempo estirala con ayuda de un palo de amasar hasta lograr un espesor medio.
Cortá tiras del mismo largo y ancho, colocalas en una fuente para horno con un poco de Aceite, tapalas nuevamente para que leuden un poco más (esta vez sólo media hora maso).
Llevalos a un horno precalentado a temperatura media y cocinalos hasta dorarlos, unos 15 minutos aproximadamente.
Dejá que se enfríen para servirlos, así quedan más duritos y crocantes. Si queres conservarlos por mucho tiempo, como a las Galletas Marineras, podes darle un golpe de horno para quitarles los restos de humedad, y luego almacenalos en un lugar seco y fresco. Durarán mucho tiempo, es muy importante protegerlos de la humedad y de los insectos y roedores, por ejemplo, en un frasco grande de vidrio. Para llevarlos a tu travesia, lo ideal es ponerlos en una bolsa de papel dentro de una bolsa hermetica, para prevenir humedades.
Que te diviertas!
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