07 mayo 2013

Cuatro mitos antilinux

Cuando un gerente de informática decide escoger Linux, como el sistema operativo de la compañía para la que trabaja, se arriesga a enfrentar los prejuicios de los demás gerentes.
Un estudio del 2003 de AMR Research Inc. listó los prejuicios más comunes sobre Linux y encontró ejemplos de la vida real que demostraron que se trataba de falacias.

Mito #1: Los recursos Linux son escasos y caros
Realidad: Las capacidades en Linux son fácilmente transferibles o desarrollables.
Una de las creencias más extendidas es que, si bien Linux es básicamente grauito, la escasez de técnicos capacitados hace que la operación sea más cara en el largo plazo. El estudio encontró que cada vez más centros de estudios alrededor del mundo estaban enseñando Linux. En Europa su enseñanza ya está muy extendida, y en los EE.UU. algunas universidades de punta ya han empezado a incluir Linux en su currícula. Lo más importante, sin embargo, es que los conocimientos sobre Linux son fácilmente transferibles, en gran medida porque existe mucha información técnica disponible libremente.

Mito #2: El código que se desarrolle en Linux debe estar abierto al dominio público
Realidad: Solo los cambios en el kernel de Linux son de dominio público; las aplicaciones específicas permanecen privadas.
Siendo Linux parte de la comunidad de fuente abierta, muchas empresas temen que las aplicaciones que sus programadores desarrollen en base a Linux deberán volver al dominio público. Esto no es cierto. Hay una inmensa diferencia entre las normas que rigen el código Linux y las que rigen las diversas aplicaciones que se desarrollan con base en Linux. Cualquier cambio que se haga al sistema operativo Linux debe ser distribuido en el dominio público. Pero las aplicaciones desarrolladas en base a Linux no tienen por qué ser de fuente abierta. De hecho, hay una buena cantidad de productos en venta basados en Linux.

Mito #3: La adopción de Linux no requiere cambiar el modo en que trabaja el departamento de informática
Realidad:La adopción de
Linux requiere nuevos procesos de TI para ser exitosa.
El código fuente de Linux está cambiando constantemente. Dado que es gratuito lo que implica que hay costos de licenciamiento, pero que tampoco viene con mantenimiento ni soporte incluido, una compañía que decida cambiar su sistema operativo por Linux debe reorganizar su personal de TI para permanecer al tanto de los cambios al Kernel de Linux. A menos que tercerice el trabajo hacia un proveedor de servicios.

Mito #4: Linux va a desaparecer
Realidad: Linux tiene el poder de permanecer.
Existe el temor de que Linux siga el camino de Unix y de que acabe sucumbiendo bajo varias versiones incompatibles. Sin embargo, esto es justamente lo que se buscó prevenir cuando el código Linux fue registrado bajo la licencia pública GNU, que a la vez que garantiza un acceso libre a su creado Linus Torvalds, cuidar el kernel (código central de Linux) incorporando los buenos cambios y rechazando otras propuestas. En el remoto caso de que Torvalds decidiera no seguir con el proyecto, existe una gigantesca comunidad Linux que sigue ocupada en desarrollar el kernel y, fuera de la comunidad de fuente abierta, gigantes de la industria como IBM, Hp y Sun vienen haciendo suya la plataforma de Linux desde hace años.

No hay comentarios:

Publicar un comentario