Siempre es un buen momento para preparar Panqueques con Dulce de Leche, y lo sabes, ni siquiera hay que dar una tibia excusa, asi que a disfrutarlos.
Ingredientes:
Leche
Harina 000
Huevos
Manteca
Dulce de Leche
Polvo de Hornear
Sal (opcional)
Aceite Vegetal suave (Girasol, Maìz, Coco, etc., opcional)
Preparaciòn:
El secreto para que la masa sea homogénea es sumar los ingredientes en tandas. Así que controlá la ansiedad. Primero batí los Huevos con un batidor de alambre, y después sumales la mitad de la Harina, Sal, y el Polvo de Hornear. Mezclá hasta que todo esté bien ligado.
Agregale la mitad de la Leche y revolvé para integrar. A continuación, incorporá el resto de la Harina y luego lo que queda de Leche hasta tener una masa lisa y líquida. Dejá reposar unos minutos.
Con la punta de un cuchillo poné un toque –apenas– de Manteca en una panquequera bien caliente (si no tenés, vale una sartén) y distribuí en toda la superficie. Volcá un cucharón de la masa en el centro y mové la panquequera para cubrir toda la superficie. No te distraigas con el celu porque enseguida están: sacudí un poco y cuando el panqueque se despega podés darlo vuelta con una espátula.
Si te animás, probá con un golpe seco de muñeca haciendo que el panqueque haga una mortal en el aire y caiga de nuevo en la sartén. Un dato para darte confianza es que la parte cruda pesa más que la cocida así que seguro cae del lado correcto. Pero no te zarpes con la fuerza porque el panqueque va a terminar en el techo.
Prepará los demás apilándolos en un plato playo para que no pierdan humedad. Después, rellená cada uno con una cucharada de té colmada de Dulce de Leche (bue, sí, mejor sopera al ras) formando una línea en un extremo, y enrollalos o doblalos tipo pañuelito. En ese caso, técnicamente acabás de crear una crepe.
Servilos tibios. De cualquier modo, no les van a dar tiempo a enfriarse.
Que te diviertas!
Ingredientes:
Leche
Harina 000
Huevos
Manteca
Dulce de Leche
Polvo de Hornear
Sal (opcional)
Aceite Vegetal suave (Girasol, Maìz, Coco, etc., opcional)
Preparaciòn:
El secreto para que la masa sea homogénea es sumar los ingredientes en tandas. Así que controlá la ansiedad. Primero batí los Huevos con un batidor de alambre, y después sumales la mitad de la Harina, Sal, y el Polvo de Hornear. Mezclá hasta que todo esté bien ligado.
Agregale la mitad de la Leche y revolvé para integrar. A continuación, incorporá el resto de la Harina y luego lo que queda de Leche hasta tener una masa lisa y líquida. Dejá reposar unos minutos.
Con la punta de un cuchillo poné un toque –apenas– de Manteca en una panquequera bien caliente (si no tenés, vale una sartén) y distribuí en toda la superficie. Volcá un cucharón de la masa en el centro y mové la panquequera para cubrir toda la superficie. No te distraigas con el celu porque enseguida están: sacudí un poco y cuando el panqueque se despega podés darlo vuelta con una espátula.
Si te animás, probá con un golpe seco de muñeca haciendo que el panqueque haga una mortal en el aire y caiga de nuevo en la sartén. Un dato para darte confianza es que la parte cruda pesa más que la cocida así que seguro cae del lado correcto. Pero no te zarpes con la fuerza porque el panqueque va a terminar en el techo.
Prepará los demás apilándolos en un plato playo para que no pierdan humedad. Después, rellená cada uno con una cucharada de té colmada de Dulce de Leche (bue, sí, mejor sopera al ras) formando una línea en un extremo, y enrollalos o doblalos tipo pañuelito. En ese caso, técnicamente acabás de crear una crepe.
Servilos tibios. De cualquier modo, no les van a dar tiempo a enfriarse.
Que te diviertas!
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