El valor de un hombre se mide por la cantidad de soledad que es capaz de soportar.Friedrich Nietzsche
El rayo produce severos daños térmicos, eléctricos y mecánicos, en función de su energía que libera su descarga. Los valores de corriente que produce un rayo oscilan entre 5.000 y 350.000 amperios, con una media de 50.000 amperios. Para tener una idea, un circuito hogareño conduce alrededor de 20 amperios.
La regla de 30 y 30
Cuando veas un relámpago, comenza a contar hasta 30. Si ois un trueno antes de llegar a 30, anda adentro. Suspende las actividades durante al menos 30 minutos después del último trueno.
Permanecé en construcciones cerradas como casas, escuelas, edificios públicos.
Desconectá, mantenete alejado de artefactos eléctricos y evitá el uso de teléfonos con cable.
Evitá bañarte, lavarte las manos y lavar ropa o platos durante la tormenta dado que las cañerías de agua pueden conducir la electricidad de los rayos.
Si realizás un viaje, quedate en el interior del vehículo. Los automóviles cerrados ofrecen una excelente protección.
Si se está circulando con un automóvil, no conducir por calles inundadas. Esto se debe a que solo 15 centímetros de agua en movimiento rápido pueden derribarte y unos 30 centímetros de agua en movimiento puede arrastrar tu vehículo.
Si estás en la playa: las carpas, tiendas de campaña o aleros no protegen de los rayos. Abandoná el lugar.
En áreas rurales alejate de animales de gran porte. Evitá permanecer en lugares elevados.
Mantenete alejado de conductores eléctricos como alambrados o verjas. Evitá refugiarte debajo de árboles o estructuras metálicas. Al aire libre si no hay ningún refugio cerca, la mejor protección es permanecer en cuclillas con los pies juntos y la cabeza gacha, apoyar las manos en las rodillas y taparse los oídos.
Evitá permanecer en cuerpos de agua, piletas, mar o ríos.
Evitá realizar actividades al aire libre.
Ten cuidado con las líneas de energía eléctrica o de servicios públicos caídas que podrían lesionarte a ti o a otras personas.
Tené siempre a mano una linterna.
El instrumento para protegerse de las tormentas eléctricas es el pararrayos, un elemento que atrae la descarga eléctrica para conducirla a tierra. Fue inventado en 1753 por Benjamín Franklin y consisten en un mástil metálico de acero inoxidable, aluminio, cobre o acero común, con un cabezal captador.
El cabezal debe sobresalir por encima de las construcciones más altas del edificio para protegerlo. Este artefacto produce un cono protector de 45 grados sobre la tierra. La punta está unida a la tierra con un cable de cobre que termina en una jabalina enterrada.
La normas de edificación exigen pararrayos en edificio altos, los que protegen a todo su entorno pero, en áreas descubiertas no existen protecciones de este tipo y los riesgos se multiplican.
Que te diviertas!
La regla de 30 y 30
Cuando veas un relámpago, comenza a contar hasta 30. Si ois un trueno antes de llegar a 30, anda adentro. Suspende las actividades durante al menos 30 minutos después del último trueno.
Permanecé en construcciones cerradas como casas, escuelas, edificios públicos.
Desconectá, mantenete alejado de artefactos eléctricos y evitá el uso de teléfonos con cable.
Evitá bañarte, lavarte las manos y lavar ropa o platos durante la tormenta dado que las cañerías de agua pueden conducir la electricidad de los rayos.
Si realizás un viaje, quedate en el interior del vehículo. Los automóviles cerrados ofrecen una excelente protección.
Si se está circulando con un automóvil, no conducir por calles inundadas. Esto se debe a que solo 15 centímetros de agua en movimiento rápido pueden derribarte y unos 30 centímetros de agua en movimiento puede arrastrar tu vehículo.
Si estás en la playa: las carpas, tiendas de campaña o aleros no protegen de los rayos. Abandoná el lugar.
En áreas rurales alejate de animales de gran porte. Evitá permanecer en lugares elevados.
Mantenete alejado de conductores eléctricos como alambrados o verjas. Evitá refugiarte debajo de árboles o estructuras metálicas. Al aire libre si no hay ningún refugio cerca, la mejor protección es permanecer en cuclillas con los pies juntos y la cabeza gacha, apoyar las manos en las rodillas y taparse los oídos.
Evitá permanecer en cuerpos de agua, piletas, mar o ríos.
Evitá realizar actividades al aire libre.
Ten cuidado con las líneas de energía eléctrica o de servicios públicos caídas que podrían lesionarte a ti o a otras personas.
Tené siempre a mano una linterna.
El instrumento para protegerse de las tormentas eléctricas es el pararrayos, un elemento que atrae la descarga eléctrica para conducirla a tierra. Fue inventado en 1753 por Benjamín Franklin y consisten en un mástil metálico de acero inoxidable, aluminio, cobre o acero común, con un cabezal captador.
El cabezal debe sobresalir por encima de las construcciones más altas del edificio para protegerlo. Este artefacto produce un cono protector de 45 grados sobre la tierra. La punta está unida a la tierra con un cable de cobre que termina en una jabalina enterrada.
La normas de edificación exigen pararrayos en edificio altos, los que protegen a todo su entorno pero, en áreas descubiertas no existen protecciones de este tipo y los riesgos se multiplican.
Que te diviertas!
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